La Elección a Senadores por la provincia de Logroño se verifica el 22 de mayo de 1910 y son elegidos por la 'Alianza Liberal' Perfecto García de Jalón y Bea, Juan Bautista de Tejada Sáenz del Prado y nuestro biografiado Saturnino Ulargui Jiménez. Los dos primeros alcanzan 185 votos de un total de electores de 210 de los que participan 186. Ulargui es votado por 184.
Con el cumplimiento de todos los requisitos estuvo en el Senado durante las legislaturas de 1910 y 1911, siendo el único riojano republicano que se sienta en el Senado en toda la historia de La Rioja.
No todos los republicanos del Distrito de Logroño capital aceptaron la selección y la elección de Mauricio Ulargui como Senador, y se dio, como en otros tiempos, una 'agria polémica' entre correligionarios.
A la cabeza de la rebelión estaba el recién creado 'Partido Radical' de Logroño, alimentado principalmente por los que fueron las bases de 'las juventudes republicanas' al arrancar el siglo XX. Así que su comité escribió una larga e interesante carta a una de las cabezas de la coalición republicana-socialista nacional, el escritor Pérez Galdós, que fue publicada en 'El País - Periódico republicano'.
La carta no tiene desperdicio y 'no deja títere con cabeza'. Maurico Ulargui es el 'gran cacique'. "Es un exbanquero de Logroño que, a falta de facultad intelectiva para elevarse por méritos propios, ha creado con su capital y por los medios vulgares, aunque lucrativos, del préstamo, un cacicato, a favor del cual somete conciencias y ataraza voluntades que le sirven a maravilla para sus medros personales."
Don Florencio Bello, "joven y notable abogado de Logroño" "se alzó un día" "contra el bochornoso contubernio llamado bloque, que el cacicato de Ulargui mantenía". Desde aquel día el republicanismo logroñés tuvo su jefe, fue proclamado jefe del partido radical y auxiliado del órgano del partido, el 'Progreso Riojano', decidió romper "el inicuo conglomerado de republicanos y monárquicos". Algunos republicanos se unieron a nuestro partido, pero "los esclavos de Ulargui" no. Don Mauricio había pactado con Miguel Salvador a respetar su candidatura como Diputado y en recompensa a Ulargui se le diera por el Gobierno un 'Acta de Senador'. Y así sucedió Miguel Salvador fue Diputado y Ulargui Senador. El candidato republicano, Florencio Bello, se quedó sin poder presentarse, al "negarle propositores para la proclamación" que llevó a que Miguel Salvador fuera electo Diputado por el artículo 29. En consecuencia, concluyen en la carta a Pérez Galdós, "Logroño republicano ha desenmascarado al cacique".
Y después siguen las réplicas, de unos u otros, en el medio local. Ulargui escribe una carta 'amenazante' en relación con lo publicado en 'El País', que la firman Eduardo Mato y Francisco Zuazo. El Dr. Ricardo Vallejo, presidente interino cuando mandan la carta a Galdós, contesta que la charla con Eduardo Mato fue particular y que el Sr. Zuazo no tenía porqué saber nada. Para cerrar el debate -'en falso'- todos los componentes del comité del Partido Radical logroñés se responsabilizan de lo aprobado y publicado en 'El País'. Se adjuntan un total de una docena de firmas de republicanos de la 2ª generación, de hijos de republicanos históricos y de varios jóvenes que con la proclamación de la siguiente República brillarán por sí mismos. Estos son los firmantes: Emilio Bergasa, Miguel Elizondo, David Marrodán, Justo Trifol, Nicolás Prieto, Salvador Cenzano, Leopoldo Hermida, Basilio Gurrea, Eustaquio Pérez, José Zapata, Segundo Royo e Hilario Tamayo.