Está escrito en mi libro 'La Rioja contemporánea. Compendio historial (1784-1996) lo siguiente:
"Publicitan cada grupo, un año sí y otro también, tras degustaciones de 'selectos' menús y paladeos de vinos, y de champañes, en los brindis de los banquetes del día de la proclamación de la República, el 11 de febrero, el 'espíritu' heredado del 73. Proclaman, en el comedor del café de 'los dos Leones', en la fonda 'El Universo', en el salón de butacas -sin butacas- del 'Teatro Principal de Logroño', ... sus ideas y deseos, sus inquietudes y proyectos, sus fracasos y sus triunfos, sus loas, panegíricos y apologías; y repiten el mismo eco en salones de cabeceras de comarca: en 'El Lazo' o en el Casino de Haro, en locales similares preparados 'ad hoc' en Cenicero, Fuenmayor, Santo Domingo de la Calzada, y en Rincón de Soto y Aldeanueva de Ebro y en Cervera de Río Alhama, Calahorra y Torrecilla; y también en los salones de sus centros. Unos juntos -coaligados- y otros por separado, cantan al unísono la bondad de la República, el sacrificio de sus héroes y mártires, los hitos cronológicos más destacados de sus esfuerzos y logros en el pasado; y recuentan -sobre todo- el número de los reunidos y las adhesiones en forma de telegramas y cartas, a la vez que proyectan un futuro adornado de excelencias y de progreso. Consideran periclitadas las reuniones de los 'notables' del pasado y del presente. Las suyas son más democráticas y ciudadanas".
La Primera República siguió estando muy presente en el imaginario colectivo de muchos riojanos decimonónicos y del primer cuarto del siglo XX. En su recuerdo se realizaron numerosos homenajes, y casi cada año se agrupaban en 'Salones, Círculos de recreo, restaurantes, bares,' ...para celebrar 'banquetes', 'reuniones' y 'mítines' de confraternización y de recuerdos.
El '11 de febrero' estuvo siempre presente como uno de sus 'días felices' del pasado y de esperanzas para el futuro.
Las celebraciones se agolpan principalmente en la década final del siglo. Pero existen noticias de algunos de estos actos en fechas anteriores y también en posteriores. Desde 1889 hasta el final del siglo, en el 11 de febrero de celebran banquetes en los que participan oradores y correligionarios. De los primeros nos interesan los que más participaron.
Los oradores de los banquetes conmemorativos son muchos. He contabilizado hasta cincuenta y cuatro diferentes durante esta última década del final del siglo. Media docena suman más de cuatro participaciones: Valeriano Velasco (seis veces), Uliverri, Hermenegildo y Francisco Zuazo Quintanilla (cinco), Ángel Pons y Montero (cuatro) y Juan Manuel Zapatero (tres).
La presencia del comerciante logroñés Valeriano Velasco Naya, frecuente Concejal del Ayuntamiento de Logroño y Diputado Provincial en algunas ocasiones en esta década final del siglo, está justificada porque en estos años es el Presidente del 'Comité posibilista', una de las fracciones republicanas mejor tratada por la prensa local. Su presencia en los 'banquetes' es prácticamente para presidirlos en calidad de directivo de este partido. 'Habla poco', y en contadas ocasiones, como orador de las reuniones.
El maestro elemental, con escuela propia privada en Logroño, Francisco Zuazo Quintanilla, es de los contados que aúna la intensidad de estas fechas (concejal republicano, miembro de juntas recreativas, animador cultural casi siempre, ...) con el gozo de ver la República en el año treinta y uno" -llegando a ser Presidente de la Diputación Provincial de la IIª República, en el bienio del Partido Radical en el poder-. Es, posiblemente, el orador más 'doctrinal' de todos los participantes.
El caso de Hermenegildo Uliverri es especial. Participa casi siempre como animador del 'banquete'. Recita poesías relacionadas con la fecha de la conmemoración, toca el piano o el violín para animar el ambiente, es la persona que anima y alegra a la concurrencia. Habla en una única ocasión cuando es Secretario del partido convocante. Simplemente pone al servicio del republicanismo logroñés los rasgos artísticos de su tradición familiar.
Ángel Pons (industrial) y Pedro Montero (abogado) son oradores en cuatro ocasiones y pertenecen a las 'nuevas generaciones' de riojanos que llegan a la República durante la 'Restauración'.
Ángel Pons pertenece al Partido 'Republicano progresista-democrático' del que en alguna ocasión fue Secretario de su comité. Desempeñó concejalías del Ayuntamiento de Logroño y en el campo que más se destacó fue en los cargos que desempeñó en la 'Cámara de Comercio' de la ciudad. (1) Agente de seguros de 'La Equitativa'. (2)
Pedro Montero. Abogado. Uno de los más implicados con los ideales de la República en los años puente entre el siglo XIX y XX. "Primero desempeñó cargos de la carrera judicial; luego abandonó ésta y ejerció de abogado; al fin volvió a su primera carrera y ha muerto de Magistrado de Audiencia... Fue político republicano y representando al partido fue al Ayuntamiento." Pedro Montero murió en Teruel en octubre de 1913 siendo Magistrado de su Audiencia. (3)
Juan Manuel Zapatero Castillo. Uno de los grandes líderes del republicanismo de La Rioja. Nace, vive y muere en Cervera de Río Alhama. Como han escrito sus biógrafos dedicó su vida "al servicio de la República" desde la niñez hasta su muerte.
Siguen apareciendo algunos 'históricos de la democracia y la República' pero simplemente se sientan en las mesas de los banquetes o son mecionados sus años gloriosos, como sucede con Carlos Amusco y Alberto Ruiz. La mayoria de los restantes que aparecen en estas conmemoraciones lo hacen por primera vez y algunos posteriormente serán representantes 'republicanos con recorrido' en años posteriores.